¡Corazones de acero! En inglés, su título es Fury, por llamarse así el tanque en el que se desarrolla la historia, una historia que se resume en: las "peripecias" (me encanta esa palabra) de un grupo de cinco soldados al final de la Segunda Guerra Mundial, que se encargarán de ir conquistando territorios en la Alemania nazi a la que le quedan ya un débil aliento de vida, pues el Desembarco de Normandía ya ha sucedido.
Mirando con atención el póster de la película, seguramente ya te hayas dado cuenta de por qué he querido verla. Sí, en una esquinita, al fondo del todo, el muchachito que asoma su hermosa cabecita no es otro que mi querido Logan Lerman. No me malinterpretes, Brad Pitt me gusta como actor y tal, pero Logan simplemente es mi ojito derecho y es capaz de arrastrarme a ver películas que, de otra manera, sólo vería si las pusieran por la tele, años después de su estreno.
En mi defensa, diré que el reparto es impecable. Los soldados, debido al poco espacio al que se ven confinados durante largas temporadas de tiempo, se convierten en una piña, una verdadera familia reticente a personas extrañas. Logan, cuyo nombre en esta película es Norman
El quinteto lo terminan Biblia (Shia LaBeouf), Gordo (Michael Peña) y Rata (John Bernthal), quienes se hacen querer, algunos más que otros. Sin embargo, en quien más te vas a fijar es en el joven Norman, quien irá experimentando un cambio radical a lo largo de la historia debido a cierto evento que me niego a desvelarte. Logan está espectacular, robándole minutos de gloria al mismísimo Brad Pitt, a quien presumía dueño indiscutible de la película.
La película me ha gustado bastante, a pesar de que llega a ser muy dura por la continua violencia que se te muestra en pantalla pero que, sorprendentemente, no raya en lo morboso por verse totalmente justificada (
Lo mejor: SPOILER A PARTIR DE AQUÍ (selecciona el texto si quieres leerlo). Mientras que los demás acaban muy mal parados (que si me pegan un tiro en el ojo, que si me revienta una granada, que si me atraviesa un misil-o-lo-que-sea), Logan acaba sin un rasguño. Ni un puto rasguño. Un poco sucio, sí, pero porque el muchacho se me reboza en el barro. Pero nada le estropea esa carita que me trae, porque el que tiene arte lo tiene siempre.
Lo peor: Como ya he dicho, la violencia de la película. Hematofóbicos, abstenerse. No creo que mucha gente soporte ver un trozo de cara (sí, he dicho un puto trozo de cara) solo dentro de un tanque. Y como eso, muchas otras cosas.
La molécula efervesente: Norman y Emma tocando el piano y cantando juntos. He chillado. He shippeado a Logan con alquien que no es Emma (Watson). Y no me he sentido mal por ello.
Grado cósmico: Estrella {4/5}. Ay, mi Logancito, que se me está haciendo hueco a codazo limpio en el cine de adultos.
¿Y tú? ¿Has visto la película? Si es así, ¿qué te ha parecido? ¿Qué es lo mejor, lo peor, etc.?
Y si no la has visto, ¿a qué esperas? Logan Lerman, tía. L o g a n L e r m a n.
No, no. Ahora no te vas sin explicar por qué no la has visto. Ahora te excusas aquí abajo. Venga. Vamos. Venga.