El puto nuevo Harry Styles.

¡Toca para ir a la lista de caps!

-Absolutamente nadie se lo esperaba-ironicé mientras veía la cara de Scott… no, del puto Scott Malik en primer plano en las cinco pantallas, paseándose con chulería en dirección al centro del escenario, como si todo aquel estadio estuviera a su nombre.
               Puede que lo hubieran construido con la idea de hacer que albergara a un equipo de fútbol nacional, pero después de esa entrada, Scott había conseguido que cada ladrillo pasara a estar a su nombre. Ni la selección inglesa sería capaz de recuperar eso que Scott acababa de quitarles.
               -EVERY CORNER, CALLING OUT YOUR NAME-proclamó, levantando una mano y saludando mientras pasaban, Diana y Tommy conteniendo a duras penas una sonrisa, cada uno a un costado de él; Layla y Chad directamente riéndose mientras avanzaban-. TRYNA FIND YOU-Scott se detuvo, acercando la mano que tenía libre al micro, como si estuviera tratando de contener su voz mientras los demás seguían en dirección hacia One Direction, que los miraban sonrientes-, BUT I JUST DON’T KNOW…
               La cámara pasó a enfocar a Tommy, Diana, Chad y Layla, un poco más adelantados que Scott, que levantaron las manos, o se inclinaron hacia delante, o flexionaron las rodillas al unirse a él:
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?-contestaron One Direction, ignorando completamente que la gente estaba muriendo en la pista. Estábamos cayendo como moscas. Y levantándonos como putos zombies.
               -Yeah, the taste of your lips at the tip of my tongue-sonrió Layla, contoneándose en dirección a su padre, la primera de Chasing the Stars que iba a entrar en contacto con la banda original y que había sido la causante de que ellos estuvieran hoy allí-, is at the top of the list of the things I want.
               -Mind is running in circles of you and me-intervino Tommy, acercándose a ella e interceptándola antes de que alcanzara a Liam. La agarró de la cintura y la pegó a él.
               Poco hablamos del puto galán que es Tommy.
               Poco.
               Hablamos.
               El pobre vivía a la sombra de Scott, pero en cuanto se alejaba un poco de él y tenía ocasión de demostrar lo que valía… era capaz de hacer que la gente se desmayara también-, anyone in between is the enemy.
               -Shadows come with the pain that you’re running from-cantó Diana, llevándose una mano al vientre mientras giraba sobre sí misma, observándolo todo a su alrededor y arrancando destellos dorados de los focos con su pelo rubio-, love was something you never heard enough.
               -Yeah, it took me some time, but I figured out-entró Chad, y Scott, Diana, Tommy y Layla se unieron a él-, HOW TO FIX UP A HEART THAT I LET DOWN.
               -NOW I’M SEARCHING EVERY LONELY PLACE-Zayn recuperó la canción; parecía dispuesto a compartirlo todo con su hijo, excepto a su público-, EVERY CORNER CALLING OUT YOUR NAME.
               One Direction fue al encuentro de Chasing the Stars en medio de la pasarela, y padres e hijos se mezclaron unos con otros mientras la gente continuaba muriendo en la pista.
               ¿Estábamos en un concierto de reunión de One Direction con la colaboración especial de Chasing the Stars o asistiendo a delitos de lesa humanidad? Era difícil saberlo.
               -¡ME VOY A MORIR!-proclamó Taïssa, y yo, por una vez, no podría decir que estaba exagerando ni aunque quisiera. A mí me estaba costando bastante respirar, y Sabrae me había enseñado a enorgullecerme de mis emociones lo suficiente como para reconocer que no era, precisamente, porque me faltara un pedazo de pulmón.
               -TRYNA FIND YOU, BUT I JUST DON’T KNOW…-Zayn llegó a un par de metros de Scott, que salvó la distancia que los separaba, se puso delante de su padre y se llevó el micro a la boca para gritar con él, y con el resto de la banda…
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?
               -ARE YOU SLEEPING, BABY, BY YOURSELF?-le preguntó Harry a Diana, y ella se rió. Porque, básicamente, la había mandado a Inglaterra para que reflexionara sobre su comportamiento de niña caprichosa y había terminado encamándose con Tommy en cosa de dos segundos-. OR ARE YOU GIVING IT-padre e hija chocaron las caderas, y Diana se apartó el pelo de la cara mientras se reía con más fuerza-TO SOMEONE ELSE?
               -TRYNA FIND YOU, BUT I JUST DON’T KNOW-se le sumó ella, y todos volvieron a repetir el nombre de la canción. La infraestructura del estadio tembló, y amenazó con derrumbarse.
               -Tell me now, tell me now-Diana le hizo gestos a su padre para que se acercara, retrocediendo por el escenario mientras le guiñaba el ojo, como invitándolo a que se sumara a ella, pero Harry estaba decidido a dejar que brillara en ese momento que, había decidido, le pertenecía más a su hija que a él-, tell me where you go when you feel afraid.
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?
               -Tell me now, tell me now-instó Chad, pegado a la espalda de su padre, que marcaba el ritmo de la canción con su guitarra eléctrica en un extra que no habían sumado nunca-. Tell me, will you ever love me again, love me AGAIN…?-Chad levantó la nota todo lo que le permitía una voz que prácticamente era desconocida en la banda, pues si Scott eclipsaba a Tommy, Tommy y Scott lo eclipsaban a él. Niall asintió, los ojos brillantes de orgullo mientras Chad ponía los pelos de punta a todo el estadio.
               -Now I’m searching every lonely place, every corner calling out your name…-continuó Zayn, y los chicos de CTS empezaron a dar palmas en alto, sobre sus cabezas, mientras One Direction echaba a andar de nuevo hacia el fondo de la pasarela-. Tryna find you but I just don’t know where do broken hearts go.
               One Direction se dispersaron por la base del escenario mientras Chasing the Stars se ocupaban de la parte que les tocaba, prácticamente trotando en dirección a ellos.
               -ARE YOU SLEEPING, BABY, BY YOURSELF? OR ARE YOU GIVING IT TO SOMEONE ELSE? TRYNA FIND YOU BUT I JUST DON’T KNOW…
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?-cantaron Tommy y Louis, que abrió un brazo y se puso de puntillas, los ojos cerrados, disfrutando del momento y canalizando la energía que se concentraba en el estadio en su cuerpo.
               -Tell me where you’re hiding out! Where do broken hearts go?
               -Come on, baby-jugó Harry-, cause I need you now.
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?-gritó Tommy.
               -TELL ME, CAUSE I’M TEN FEET DOWN-contestó Louis.
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?-cantaron padre e hijo-COME ON, BABY, COME AND GET ME OUT.
               -COME ON, BABY, COME AND GET ME OUT-se picaron Zayn y Scott.
               -COME ON, BABY, CAUSE I NEED YOU NOW-cantaron Liam y Layla.
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?-clamaron Niall y Chad.
               ­-WHERE DO BROKEN HEARTS GO?-se sumaron Louis y Tommy.
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO?-añadieron Zayn y Scott, Liam y Layla, Harry y Diana.
               -WHERE DO BROKEN HEARTS GO!-terminaron, y Chasing the Stars hicieron la típica pose de programa de talentos musicales, levantando el micrófono en alto, mientras algunos de sus padres daban una patada al aire, otros se inclinaban hacia delante, y otros agitaban la mano como si estuvieran lanzando una pelota de béisbol.
               Las caras de los diez se deslizaron por las pantallas, los recién llegados jadeantes, con los ojos saltando por las gradas mientras sus padres se inclinaban para darles un beso, acariciarles el pelo o abrazarlos.
               Y luego, por supuesto, la súper estrella de su banda, y también del universo, se llevó el micro a la boca.
               -¡Woohooo! ¡Wembley, haced un poco de ruido!
               Las luces brincaron al unísono, formando una curiosa marea, cuando obedecimos las órdenes de Scott. Es increíble la suerte que teníamos con él: podría ordenarnos que marcháramos sobre un país indefenso y lo haríamos, pero Scott se conformaba con dejarnos afónicos.
               -¡Así me gusta!
               -¡Eh! ¡Eso es algo nuestro!-protestó Harry, fingiendo que se ponía territorial. Louis, Tommy y Scott se echaron a reír.
               -¡Buenas noches, Wembley!-saludó Layla, y Duna se puso a agitar la mano en el aire como si le fuera la vida en ello… o no hubiera estado con ella hasta hacía cinco minutos-. ¡Qué alegría poder estar aquí con todos vosotros! ¡Muchas gracias por recibirnos!
               -Por si no os habíais enterado, nos hemos reproducido-bromeó Louis-. Algunos con más éxito que otros-añadió con retintín, mirando a Harry, que puso cara de confusión y se llevó el micro a la boca con dramatismo.
               -Mm, ¿por qué debería insistir cuando ya a la primera me salió una hija inmejorable?
               -Dilo, suegro número uno-soltó Tommy, y todo el mundo se echó a reír-. O sea-añadió, girándose para mirar a Liam-, que no es que…
               -Sí, sí, sí. Ahora arréglalo con el suegro número dos, criajo.
               No obstante, le revolvió el pelo con una sonrisa en los labios, con lo que la sangre no llegó al río.
               -Para nosotros es muy importante estar hoy aquí-explicó Chad-. Sin ánimo de ofender, pero somos los mayores fans de One Direction, y poder compartir escenario con vosotros… simplemente, gracias, papá-ronroneó, y hubo gemidos de adoración entre el público. Ni confirmo ni desmiento que yo fui de los que gimió más fuerte.
               -Oh, oh. Alguien quiere asegurarse de que no cambian el testamento para incluir a su hermanita-canturreó Tommy, y Chad le dio un empujón en broma.
               -¿Queréis seguir pasándooslo bien, Londres?-preguntó Scott, y sonrió con satisfacción cuando obtuvo la respuesta que quería: un rugido ensordecedor-. Genial. Disculpad a nuestros padres si desafinan demasiado en comparación con nosotros. Son viejos y ya no están para muchos trotes.
               -Yo no picaría a Zayn, S. Sabes que te puede hacer la competencia si quiere-le recordó Diana, sonriendo.
               -La gente ha venido a ver un buen espectáculo. Además, mi padre podrá hacerme la competencia, pero nunca podrá ganarme.
               -Cuidadito con ese ego, chaval. Serás una promesa y todo lo que tú quieras, pero aquí hay gente consolidada. El día que la gente piense en ti y no en mí al oír nuestro apellido, entonces podrás decir lo que te dé la gana. Mientras tanto…-le pellizcó los labios juntos, y Scott trató de revolverse-, respeta las canas. Sobre todo cuando estés en mi escenario.
               -Oh, ¿ahora es tu escenario?-preguntó Louis-. ¿Hasta cuándo? ¿Dentro de dos días, cuando sea veinticinco?
               Nos echamos a reír, Sabrae la primera.
               -¿Algo que objetar a lo que ha dicho tu padre acerca de en quién piensa la gente al escuchar tu apellido, pequeña Malik?-le pregunté, y ella se encogió de hombros.
               -Que aprovechen los dos. Yo todavía no estoy en activo-se chuleó.
               -Ésa es mi chica-alabé, y ella se apartó el pelo del hombro y se echó a reír, incapaz de mantener su farsa durante mucho más tiempo.
               -Qué puñaladita-rió Liam, y Zayn se encogió de hombros.
               -Louis necesita calentar la voz para poder darlo todo esta noche, así que no me importa que me use como diana para sus bravuconadas. No es que me sorprenda que le haga gracia que eduque a mi hijo en la humildad, teniendo en cuenta que Scott seguro que lo ha sacado de él.
               -Eh, ni de puta coña, papá-contestó Scott.
               -Pero si tan amenazados os sentís por nuestro éxito, podemos presentarnos. Ya sabéis-Layla les guiñó un ojo-, para que sigáis con esa fantasía de que sois más importantes que nosotros. ¡Hola, Londres! Yo soy Layla. ¡Layla Payne, a vuestro servicio!-saludó, haciendo una reverencia como una dama de época.
               -Pobrecita-comentó Niall-. Dice su apellido pensando que significa algo.
               -Chad-Chad hizo una profunda reverencia, y se rió ante los aplausos que despertó su nombre.
               -Para quien no me conozca…-empezó Scott, y Tommy lo cortó.
               -Claro que te conocen, Scott. ¡Eres el puto nuevo Harry Styles!
               Harry fue el que más fuerte se rió ante aquella ocurrencia, y lo señaló con un dedo mientras asentía.
               -Yo soy Tommy, el cerebro de esta banda. Scott es la cabeza visible, pero simplemente porque hemos hecho un estudio y la gente con piercings tiene más atractivo. No penséis que es por nada en particular. Y nos queda nuestra reina rubia…
               Tommy sonrió con maldad cuando Diana se acercó el micrófono a la boca, sabiendo lo que venía a continuación. Un par de acordes de guitarra eléctrica sonaron con fuerza en los acordes, y Zayn se llevó el micrófono a la boca.
               -Diana-entonó, y Diana alzó una ceja.
               -¿Os creéis originales?
               Pero se puso a bailar como la que más cuando la canción arrancó definitivamente, contoneándose delante de Liam y su propio padre mientras se ocupaban de sus versos. Diana levantó una mano, el dedo apunando hacia el cielo mientras cantaba su nombre con el resto, One Direction y CTS por igual.
               -DIANA!-clamó, sonriendo-, LET ME BE THE ONE TO LIGHT A FIRE INSIDE THOSE EYES.
               -You’ve been lonely, you don’t even know me-corearon las amigas de Sabrae, haciendo una rosquilla de ocho piernas y empezando a girar sobre sí mismas-, but I can feel you crying.
               En ese momento, Diana se inclinaba hacia delante, escupiendo el verso que daba un poco de consuelo a todo aquel que se creyera solo con sus pensamientos y su sufrimiento. Se apartó el pelo de la cara en el mismo gesto que tenía su padre y que ya había exhibido un par de veces durante el concierto, cuando su voz disfrutaba de mayor libertad.
               -It’s only been four months but you’ve fallen down so far-continuó Niall, acercándose a ella, que asintió con la cabeza con gesto serio. Chad le rodeó la cintura y le preguntó:
               -How could someone mislead you at all?
               -Wooo-aaah-ooooh-cantó Layla mientras Diana se encogía de hombros, negando con la cabeza, la boca torcida.
               -I wanna reach out for ya, I wanna break these walls-Tommy se acercó a ella, estirando la mano en su dirección, y se llevó una mano al vientre… exactamente igual que hacía su padre.
               No pude evitar mirar a Sabrae y empezar a preguntarme cuántos de sus gestos eran originales de ella, y cuántos había copiado directamente de Zayn o de Sher. Sí que me había dado cuenta de cosas que hacía y que ya había observado en Scott, pero nunca pensé que la influencia de los padres fuera a ser tal que se pudiera distinguir a los hijos incluso si hubieran estado encapuchados, sólo por su lenguaje corporal. ¿Cuántos conciertos habían presenciado en primera persona para que todo aquello les saliera tan natural?
               -I speak a different language, but I still hear you call-añadió Louis, poniéndose de puntillas mientras hacía la nota alta, algo que hizo que varias personas murieran en el público. A las fans siempre les había enternecido esa costumbre de Louis por lanzar su voz de manera tan física que incluso su cuerpo se abandonaba a esa tendencia suya, como si estuviera dispuesto a estirarse cuan alto era con tal de llevarla hasta las estrellas. Volvieron a centrarse en el estribillo, con Diana brincando aquí y allá, dueña absoluta de la canción que le había dado nombre, y cuando llegó el puente de la canción, miró a su padre, como pidiéndole permiso, y se colocó al frente de todos, robándole el puesto de líder que Scott había reclamado sin tan siquiera pretenderlo. Su cara reluciente de felicidad ocupó toda la pantalla, y miró directamente a la cámara.
               Mira, una costumbre que habían adquirido ellos solos: mientras sus padres miraban al público, aquella obligación de mostrarse accesibles incluso a través de una pantalla en el principio de su carrera ya superada, Chasing the Stars todavía tenían muy reciente el paso por el programa, y aquellos movimientos preparados para las actuaciones televisadas seguían grabados en lo más profundo de su piel.
               -We all need something-cantó, y su voz vibró un poco por la falta de aliento al haber estado correteando de un lado a otro-. This can’t be over now. If I could hold ya…-se rió cuando sus compañeros de banda la rodearon, Tommy y Chad arrodillados a sus pies, Layla y Scott a sus costados, y comenzaron a dar palmas al ritmo de la música-, I swear I’d never put you down.
               -DIANA!­-contestaron los padres de los chicos, y Diana se apartó el pelo del hombro con chulería, su melena volando al viento mientras se giraba para mirar a One Direction. Estos se ocuparon en soledad del último estribillo, y Scott y Zayn compitieron por las notas altas del final de la canción, los coros de su nombre, mientras Harry y Tommy compartían la confesión de que ella les había salvado. Diana agitó los hombros al ritmo de la música, los pies anclados en el suelo del escenario, y sonrió con chulería cuando los gritos enloquecidos del público acallaron los últimos acordes de la canción.
               -¡Londres!-nos picó, y respondimos gritando más fuerte. Se echó a reír, apartándose de nuevo el pelo de la cara-. ¡Guau, muy bien! No parecía preparado, ¿verdad?-preguntó, recolocándose el pinganillo y jugueteando con su top ceñido blanco, que dejaba a la vista parte de su vientre-. Sabemos que hay canciones que querríais que priorizáramos antes que esta, pero, ¿qué puedo decir?-se llevó los índices a las mejillas-, no todos en esta banda tienen una canción con su nombre, ¿cierto?-se giró y miró directamente a Scott, sacándole la lengua.
               -En realidad, más bien los demás somos lo suficientemente importantes como para que dediquen más de dos segundos en pensar nuestros nombres. Pero si así duermes por las noches, Didi…
               -Ya, ya. Claro, claro, claro.
               -¿Lo estáis pasando bien, Londres?-preguntó Liam, y rugimos de nuevo a modo de contestación-. No os importa que hayamos invitado a nuestros hijos a que nos hagan compañía en el escenario, ¿a que no?
               -NO.
               -Genial. Porque nos daba terror pensar en qué geriátrico nos meterían si no les dejábamos participar en este evento. Algunos tenemos ya un pie en la tumba, ¿eh, Louis?
               -¿Me estás llamando viejo?
               -Si necesitas que te lo confirme, es que además de viejo eres tonto-sentenció Zayn, riéndose.
               Me giré y miré a Eleanor, que me devolvió la mirada al percatarse del cambio de mi atención.
               -¿Tú no bajas?-pregunté.
               -Demasiado talento junto si me subo al mismo escenario que Zayn-respondió, y Mimi se echó a reír.
               -Sabes que se lo voy a decir a Scott, ¿verdad?-preguntó mi hermana.
               -Oh, por favor, hazlo-sonrió, recolocándose un pendiente. Me pareció que estaba demasiado guapa para estar entre el público, y ella tenía tanto derecho como Scott o Tommy a estar allí abajo, así que mi cabeza, que ya tenía tendencia a ver conspiraciones, se puso a trabajar a mil por hora, tratando de justificar que Eleanor no fuera a participar en el concierto esa noche.
               -Quedaste mejor que ellos-dije-. ¿No deberías haber entrado la primera?
               Eleanor alzó una ceja, pero por lo menos tuvo la decencia de no ser tan sinvergüenza como su novio o su hermano, y no me negó que ella también iba a acabar allí abajo.
               -Al, cuando vas a un concierto, el artista principal no sale antes que el telonero.
               Me eché a reír, y dejé que Eleanor lidiara con sus amigas, que si bien estaban de acuerdo con que se merecía estar en el escenario igual que Chasing the Stars, le recriminaron que se comportara como una chula, a lo que ella contestó que estaba justificado: era la única que había ganado el concurso, así que podía presumir todo lo que quisiera.
               -… claro que creo que hay muy pocas mujeres en este escenario comparadas con las del público-continuó diciendo Layla, cuyas interacciones con los demás de la banda me había perdido.
               -¿Qué dice Lay?-le pregunté a Sabrae, que me siseó sonoramente-. ¡Pero bueno!
               -Haber estado atento-dijo, sacándome la lengua. Pero, cuando le puse ojitos, se apiadó de mí-. Van a cantar Girl almighty.
               -¿Y tú eso cómo lo sabes?-pregunté, entrecerrando los ojos. Había reaccionado con la misma sorpresa cuando habían anunciado que cantarían They don’t know about us, y se había puesto a saltar como la que más cuando empezó el concierto con la canción que daba título a su disco debut. Aquel entusiasmo no podía ser fingido: Sabrae no sabía cuáles eran las canciones que habían pasado el corte de los años y habían conseguido colarse en la lista de las que serían interpretadas esa noche.
               Saab me miró con una ceja alzada.
               -Al, mi amor. ¿Por qué crees que tenía un micro en la mano cuando llegaste esta tarde? Yo me ocupé de hacer las pruebas de sonido. Y adivina qué canción me gusta lo suficiente y me parece lo bastante ruidosa como para cantarla cinco veces seguidas.
               Abrí la boca para contestar, pero en ese momento Layla proclamó:
               -¡Vamos con la Run the world (girls) británica, chicas! ¡Cantad muy, muy fuerte!
               Y la explosión de sonidos alegres y exaltados que precedía a Girl almighty reventó en los altavoces, acallando por un instante los gritos de entusiasmo que cada gesto de los diez ídolos sobre el escenario provocaba.
               Todos se pusieron a corretear por el escenario, brincando y bailando al ritmo acelerado de la música.
               -Hey, hey-instó Layla, sonriendo.
               -Oh, no, no, no-respondió Liam, ocupándose del primer verso de la canción, y Layla, del segundo.
               -She floats through the room on a big balloon-cantó Harry, y Diana le tomó el testigo a pesar de que aquello, técnicamente, le correspondería a Liam.
               -Some say she’s such a fake, that her love is made up, no, no, no, no.
               -Let’s have another toast to the girl almighty!-instó Chad, levantando los brazos mientras su padre rasgaba la guitarra-. Let’s play we stay young, stay made of lightning-cantaron juntos, y Zayn se llevó el micro a la boca.
               -Am I the only, only believer?
               -There’s something happning here-cantamos todos, nosotros incluidos, y nos echamos a reír cuando los hijos de la banda se pusieron a agacharse mientras se ocupaban de hacer los coros, como si eso de cuya existencia especulaban les asustara-. There’s something happening here.
               -The only, only believer-Zayn sacudió la cabeza en su nota alta.
               -There’s something happening here, I hope you feel what I’m feeling…
               -…too-continuó Liam solo, y Scott se acercó a la base del escenario junto con Layla, y se pusieron de rodillas mientras cantaban sobre hacer ese mismo gesto, para la locura de absolutamente todo el estadio, que no podía creerse que Scott (Scott) estuviera mostrando deferencia ante nadie.
               Aunque como para no hacerlo, la verdad. Después de todo, si estaba ahí, en todos los sentidos en que podemos interpretar el verbo “estar”, era gracias a lo que había pasado hacía 25 años y que hoy se estaba conmemorando.
               -Her light is as loud as as many am-bu-lances-cantó Louis, agitando el puño en el aire frente a Diana, y Tommy entró en el segundo verso.
               -As it takes to save a saviour, oh, woah, woah, woah-Tommy meneó los hombros, riéndose, y guiñó el ojo mientras se retiraba para dejar el espacio a Niall y Chad, que se repartieron sus versos de la misma manera que lo habían hecho ellos. Harry siguió en la parte de antes del estribillo, seguido más tarde por Louis.
               Esta vez, quien hizo la parte de Zayn fue Scott, que subió las notas todo lo que le permitieron sus cuerdas vocales. Más allá del límite a las que las había llevado Zayn.
               -¿Esas tenemos, chaval?-se burló Zayn mientras los demás continuaban con el estribillo; Liam y Layla jugando mientras compartían los versos de éste, Niall y Chad haciendo lo propio mientras el hijo agitaba la mano libre en el aire.
               Con las últimas notas, las luces del escenario empezaron a parpadear a toda velocidad, haciéndolos parecer criaturas de otro mundo, hijos de musas que sólo podían existir durante aquella canción.
               O la que vino después, enlazada directamente con ésta sin ningún tipo de intermedio.  Niall se lució con la guitarra lo que aún no le habían permitido con la voz, subido a uno de los bancos en los que habían sentado a sus esposas durante las baladas más emotivas, y saltó de éste cuando acabó Girl almighty.
               Repitió los dos últimos segundos de la canción una vez. Y luego, otra. Y luego, como si sus manos hubieran usado a Girl almighty como calentamiento, transicionó directamente a otra canción que empezaba con una guitarra en el mismo tono alegre, aunque puede que no tan caótico.
               El público chilló en reconocimiento, liderado por Taïssa, mientras Liam hacía bailar su micrófono entre las manos y elegía a una chica entre el público para cantarle.
               -Lately I found myself thinking, been dreaming about you a lot…
               La chica empezó a llorar con algo que no podría describir que no fuera como violencia, pero Liam no se apiadó de ella. Harry, sin embargo, estaba concentrado en el centro de la pasarela, marcando el ritmo de la canción con el pie.
               Scott entró a matar en el estribillo, apropiándose de una parte que dudaba que Zayn, a sus cuarenta años, estuviera dispuesto a hacer: deletrear la palabra “amor” como si le diera miedo pronunciarla. No sólo porque era un poco tonto, sino porque, bueno… tenía cuatro hijos. Si no le había dicho a Sher que la quería a estas alturas de la película, era que Sher estaba desesperada por tener descendencia y se había conformado con el primer tío guapo que se le había puesto delante. Una lástima que aquel tío no hubiera sido yo.
               Miré a Sabrae, que daba brincos mientras coreaba la canción, una sonrisa de felicidad iluminando su rostro. Y me di cuenta de que no, realmente Zayn no tenía más suerte que yo. Sabrae era su hija, vale, pero también era mi novia. Uno de los dos tenía ventaja sobre el otro, pero no voy a decir quién soy.
               -Back in my head in my head we were kissing…-cantó Niall, y Chad y Layla se asomaron por detrás de su espalda, silbando como en la canción original-. I though things were going alright.
               -Alright, alright-se burló Louis.
               -With a sign on my back saying “kick me”-esta vez, quienes se asomaron por detrás de él fueron Scott y Diana-. Reality ruined my life-Niall se llevó un dedo al ojo y fingió que le caía una lágrima.
               -GO, TOMMY, GO-bramó Scott, corrigiendo el grito de todo el público… excepto los nueve de siempre, que sabíamos de sobra que Tommy se iba a ocupar de ese verso de la canción.
               -Feels like I’m constantly playing-silbaron por detrás de Tommy-, a game that I’m destined to lose-echó a andar en dirección a su padre-, cause I can’t compete with your boyfriend-dijo, y cogiéndole la mano al hombre que se lo había dado todo, terminó-, he’s got 27 tattooooooooooooooooos…
               Louis sonrió y le dio una palmadita en la espalda, guiñándole el ojo al ver cómo mantenía la nota incluso cuando Zayn estaba ocupándose del estribillo, con clara intención de dejar mal a su hijo. Louis se ocupó del puente que le pertenecía; Diana se adueñó del de su padre, y luego, Louis y Zayn continuaron sus partes, Zayn subiendo más y más las notas mientras Scott trataba de seguirle el ritmo.
               -Me encanta-rió con maldad Sabrae, aplaudiendo como loca mientras su hermano se quedaba atrás.  Zayn subió y subió y subió la nota, aguantando mientras los demás terminaban la canción, y cuando los gritos resultaban tan ensordecedores que temí por la integridad de mi caja torácica, agitó la mano como si lanzara una piedra a un río, pretendiendo que saltara sobre la superficie, y se calló.
               El público estalló en vítores capitaneados por todos en el escenario, especialmente Tommy. El único que no se unió a la fiesta fue Scott.
               -Tenías que marcar territorio, ¿eh?
               -Tenía que ponerte en tu sitio-corrigió Zayn, revolviéndole el pelo a Scott. Éste bufó, intentando apartarse de él.
               -Para, papá.
               -Sí, paaaaraaaaa, papáaaaaaa-baló Louis-. No querrás avergonzarlo delante de noventa mil personas.
               -¡Más las que luego decidan ver el concierto en sus casas en sus plataformas de streaming favoritas!-sonrió Harry, levantando los pulgares y esbozando una amplísima sonrisa.
               -Creía que iban a sacar un DVD-dijo Max.
               -También venden los derechos de explotación a las plataformas de streaming-dijo Kendra.
               -¿Entonces qué sentido tiene sacar un DVD?
               -Poder verlo cuando quieras. Taïssa se pone los documentales de Zayn mínimo una vez cada dos semanas.
               -Hay que permanecer informada. Siempre descubro algo nuevo-respondió la aludida.
               -¿Y no será porque te lo cuento yo?-replicó Sabrae.
               -¿Nos perdonaríais si os dejáramos un momento con estos principiantes?-preguntó Niall, pasándole la mano por el hombro a Chad y dándole un achuchón-. Os prometemos que volveremos en nada.
               -Es que están de la próstata-comentó Chad-. Los años no pasan en balde, y no queremos que haya accidentes. Ni que se interrumpan canciones porque uno de vosotros está en el baño, ¿verdad, Louis?
               -Jo. Der. Fue sólo una vez. Y ya le pedí perdón a toda España por aquello. Harry, en cambio, no se disculpó ni una sola vez por esa entrega de premios en la que tuvimos que esperar a que viniera corriendo del baño para empezar con nuestro discurso de agradecimiento.
               -Porque ganamos igual-sonrió Harry.
               -Y eso es porque ¡tenemos las mejores fans en el mundo!-proclamó Niall, y nos pusimos a gritar. Liam agitó la mano en el aire.
               -¡Volvemos enseguida! Gracias por vuestra paciencia. ¡Os prometemos que no tendréis tiempo a echarnos de menos!
               -Lo dudo-lloriqueó Astrid en la fila delantera, y Sabrae se inclinó y le dio un abrazo mientras One Direction desaparecían por la boca del escenario, dejando a Scott, Chad, Layla, Tommy y Diana pululando solos por ahí. A modo de entretenimiento, Diana nos azuzó para que gritáramos, y luego nos mandó callar. Nos fue haciendo gritar por sectores, y luego silenciándonos de a una.
               Me dieron escalofríos al darme cuenta de que una sola chica acababa de conseguir que noventa mil personas se mantuvieran en silencio.
               -¡CHAD, CÁSATE CONMIGO!-chilló alguien en el público.
               Bueno, casi en silencio.
               -Lo siento, ya estoy emparejado-sonrió Chad-. Pero si, por lo que sea, sale más, serás el primero al que llame.
               -Aparte de contraer matrimonio, ¿alguien quiere que hagamos algo más? ¿Qué os parece si cantamos algo?-sugirió Layla, girándose hacia sus compañeros.
               -Fantástica idea, Lay. ¿Alguna sugerencia?-preguntó Scott, que acababa de recoger una bandera arcoíris del suelo y se la había colgado de los pantalones. ¿Pretendía hacer algún tipo de declaración? Porque a toda Inglaterra le había quedado muy claro que no le importaba meterle la lengua hasta el esófago a los tíos, sobre todo si estos tenían un nombre que empezaba por T y acaba por “ommy”.
               -De hecho, hay esta canción…-meditó Layla, mirando a los demás con gesto travieso. Tommy chasqueó la lengua.
               -Ooh, ¡ya veo por dónde vas, princesa! ¿Didi?
               -¿Por qué no? ¡Hagámoslo!
               -¿QUÉ PASA? ¡ESTOY NERVIOSÍSIMO!-protesté, pero no pudieron escucharme. Sabrae se rió, así que mi ataque de pánico al menos sirvió para algo.
               -Como ya sabéis todos los que estáis aquí, le debemos todo lo que somos a una banda importantísima de este país. Y, mientras nuestros padres no están, no se nos ocurre mejor manera de hacerles un homenaje que cantando uno de sus mayores éxitos, aunque fuera uno que en su momento no tuvo el reconocimiento que se merecía, o al menos no por sus autores-dijo Tommy-. ¡Londres, ¿estáis preparados para saltar?!
               -¡SÍ!
               -¡No os oímos, Londres!
               -¡SÍ!
               -¡Pues vámonos! ¡Dale caña, Josh! ¡A por el hit de la mejor banda de la historia de este país!-urgió Chad, girándose hacia su batería, que marcó el ritmo con las baquetas de la que no podía ser otra que…
               -The sun goes down, the stars come out…-empezó el irlandés, y ya no pudo continuar. Los cinco psicópatas se echaron a reír cuando el público reconoció Glad you came, de The Wanted. Les tiraron peluches con más rabia de la que parecía adecuada para unos muñecos tan adorables, pero se merecían poco menos.
               -Era broma, era broma. Queríamos asegurarnos de que seguíais despiertos-rió Diana-. Un beso para todos los integrantes de The Wanted. Admiramos muchísimo su carrera también, y una de nuestras canciones más especiales fue interpretada inicialmente por ellos. Pero tranquilos, sabemos de dónde venimos y sabemos que habéis pagado por ver a One Direction, así que dejaremos We own the night para otra ocasión.
               -Esta es una ocasión especial y se merece una celebración especial-dijo Tommy-. Y no se nos ha ocurrido otra cosa que interpretar…
               -… por primera vez…-sonrió Layla.
               -… en absoluta exclusiva-añadió Chad.
               -… y rigurosísimo directo…-continuó Diana, y Scott se mordisqueó el piercing al sonreír.
               -… nuestra primera canción original como banda.
               Me giré y miré a mis amigos, que tenían los ojos como platos. No podía ser verdad. No podía ser puto verdad. Scott y Tommy no podían haber sido capaces de ocultarnos algo así. La madre que los parió.
               El estadio estaba como loco; si había alguien que no conociera a Chasing the Stars, desde luego lo disimulaba muy bien. Todos estaban entregadísimos gritando a pleno pulmón mientras Scott sonreía.
               -La tendréis disponible en un par de días en todas las plataformas digitales, y, por supuesto, irá incluida en nuestro primer disco. Todavía no tenemos nombre, ni hemos compuesto todo lo que nos gustaría, pero creemos que un adelanto es lo menos que podemos daros… sobre todo porque, bueno, somos muy conscientes de que muchos de los que estáis aquí seréis también los que apoyaréis nuestra carrera, así que queremos daros las gracias de la mejor manera que sabemos: cantando. Así que, ¿preparados, Wembley?
               Scott esbozó su mejor sonrisa torcida al escuchar los gritos afirmando que sí, y se llevó el micro a los labios para soltar antes de que empezara la música:
               -Bueno, ésa es vuestra opinión.
               Sabrae rugió una risa, y yo me incliné hacia ella.
               -¿Sabes qué van a cantar?
               -Relájate y disfruta, Al.
               -¿Eso es un sí?
               Sabrae me guiñó el ojo y se apartó los mechones sueltos del moño de la cara mientras una guitarra eléctrica partía el aire en dos. La batería entró al segundo, con una cadencia que me resultaba vagamente familiar, mezclando rock con un poquito de pop nada más.
               -I’ve. Been hyp. Notized-sonrió Tommy, empezando la canción. Taïssa exhaló un berrido que me heló la sangre.
               -¡NO ME LO CREO!
               -By bright red candy lips. And an. Gel eyes. He-hey.
               -I know. That it. Ain’t right-cantó Layla-, her beauty comes with pain. My hands. Are tied.
               -I want her, every body…-empezó Scott, y el público se vino arriba.
               -WANTS HER. SHE KNOWS IT. EH. EH. EH. I WANT HER, BUT I BETTER RUN AWAY.
               -OH-OH-OH-se metió Diana, y los cinco empezaron a cantar el estribillo de la canción.
               -SHE’S SO MEAN BUT I GOTTA LOVE IT. AND I JUST CAN’T LET HER GO. I’M SO WHIPPED ON HER TINNY LITTLE- SHE’S A SEXY ANIMAL.
               -Spends too much and I never tell her no-se contoneó Layla-, drives me nuts and she got me by the throat.
               -SHE’S SO MEAN BUT I KINDA LOVE IT, AND I JUST CAN’T LET HER GO.
               -LA-LA-LA-se metió Chad-, LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA. LA-LA-LA.
               -I JUST CAN’T LET HER GO-volvió Diana.
               -LA-LA-LA. LA-LA-LA-LA-LA-LA-LA. LA-LA-LA.
               -I JUST CAN’T LET HER GO-volvió Tommy.
               -Breaks a billion hearts, I know I’m next in line but I don’t mind, oh-oh
               -I want her, everybody wants her, she knows it, eh, eh, eh. I want her but I better run away-cantó Scott, subiendo la nota y sonriendo al escuchar los gritos. Volvieron al estribillo, y entonces Chad se adelantó para ponerse con el puente.
               -Just one more time. Just one more time…-subió la nota mientras Layla entraba tras él.
               -Just one last time. Just one last time….
               Creí que el estadio se caería cuando volvieron al estribillo, y apenas se les escuchó por encima de los gritos histéricos del público al recibir, 22 años después, un regalo que One Direction les había puesto en los labios para luego arrebatárselo. Creí que no podría haber más ruido hasta que los padres de los chicos regresaron por todo lo alto, directamente con Kiss you sonando de fondo y apresurándose hacia el centro del escenario. De nuevo, compartieron los solos con sus hijos, que se dedicaron a bailotear por el escenario y pasárselo bien, ahora que ya habían asegurado su triunfo en el mundo de la música.
               De nuevo, Zayn y Scott compitieron por las notas altas, Scott ahora luciéndose un poco más gracias a que había calentado la voz. El descanso parecía haber hecho que Zayn se relajara, así que no le dio tanta guerra, pero aun así fue un espectáculo digno de ver.
               -And let me kiss you-terminó Harry, y Diana le dio un beso en la mejilla igual que lo hacía  Zayn en el vídeo de la canción.
               -Ya estamos de vuelta-sonrió Liam cuando se diluyeron un poco los gritos, y eso que Niall no hizo mucho por conseguir silencio, pues a cada poco continuaba tirando besos hacia el público.
               -¿Nos habéis echado de menos?-quiso saber Louis, y rugimos a modo de respuesta. Louis hizo una mueca y miró a Tommy-. Mm, puede que queráis cambiar vuestro primer single. A juzgar por su reacción, diría que no les ha gustado mucho.
               -¡NO!-gritamos todos, y una cacofonía de voces se alzó para cantar las alabanzas de la canción que One Direction habían dejado escapar tan tontamente, y que CTS habían recuperado con tanta habilidad. Gritos de “me encanta”, “es genial”, “es un bop” y demás flotaron en el aire, mezclándose con las estrellas, en tantos tonos de voz y acentos distintos que era difícil convencerse de que no estábamos en la torre de Babel.
               -Qué más quisierais, Louis. Nosotros no vamos a cometer el mismo error dos veces-soltó Layla, guiñándole un ojo al mayor de todo el escenario. Louis se echó a reír y asintió con la cabeza, levantando las manos.
               -Tenía que intentarlo.
               -¿Seguimos un poco más, Londres? ¿Queréis más música?-animó Niall, y de nuevo el estadio amenazó con caerse-. Genial, porque todavía os tenemos un par de cositas preparadas. Niños-se dirigió hacia Chasing the Stars-, ¿nos acompañáis, verdad?
               Chad asintió con la cabeza, y su padre continuó, rasgando la guitarra distraídamente, con una pereza que parecía estar preparándolo para volver a la carga, dirigiendo el instrumental de la banda de la misma manera que Zayn controlaba las voces de los demás, o que Scott había capitaneado a CTS sobre el escenario.
               -Hace mucho, mucho tiempo, sacamos una canción que os entusiasmó desde el minuto uno. Es una de las baladas a las que más cariño le tenemos porque es de las pocas veces en las que involucramos a nuestras familias en el proceso creativo. Seguro que ya os hacéis una idea de lo que viene a continuación, ¿verdad?
               -¡Story of my life!-adivinaron las amigas de Sabrae, cuya voz cantante continuaba siendo Taïssa. Sabrae sonrió, pasándose una mano por el rostro mientras Niall asentía con la cabeza.
               -¿Estás bien, bombón?-pregunté, poniéndole una mano en la espalda, justo en la parte que tenía al descubierto. Comenzaba a hacer frío y me recriminé a mí mismo no haberme traído nada que pudiera ofrecerle para resguardarla del fresco, pero sospechaba que Sabrae todavía no estaba acusando el cambio de temperatura. Mi chica asintió con la cabeza.
               -Sí, es sólo que… yo ayudé un poco con lo que van a proyectar en la pantalla.
               -Pues no te preocupes, entonces. Si tiene tu toque mágico, va a salir todo genial, ya lo verás.
               Sabrae me sonrió con timidez, dejando que le diera un achuchón tranquilizador. A veces ser perfeccionista era una carga más que una virtud; no es que yo lo hubiera vivido en mis propias carnes, pero después de pasar tanto tiempo con ella, había aprendido lo mucho que pueden llegar a atormentarte los detalles más insignificantes.
               Hasta en eso nos hacíamos bien: equilibrábamos la balanza del otro con nuestra mera presencia, yo siendo un puto caos, y ella una maniática del control. Aunque sí que es cierto que ambos éramos detallistas.
               Y, pensándolo bien, la verdad es que yo también me comía mucho la cabeza cuando quería hacerle un regalo a alguien a quien yo quería. Siempre acertaba, o eso me decían los demás, pero estar en mi cabeza hasta el momento antes de que rasgaran el papel era un auténtico infierno, así que me imaginaba por lo que tenía que estar pasando Sabrae: ella no estaba haciéndole un regalo a su padre, sino a millones de personas que estarían pendientes de las pantallas.
               -Esta canción marcó un antes y un después en nuestras vidas porque, por primera vez, expusimos lo que éramos para que todo el mundo pudiera verlo. Nuestros miedos, nuestras esperanzas, nuestras añoranzas y nuestros deseos. También os enseñamos a nuestras familias, y nunca fuimos tan humanos y tan reales como en este videoclip. Pero, afortunadamente, nos ha pasado como al resto del mundo, y nuestras respectivas familias han crecido e incorporado a nuevos miembros con tanto derecho a reclamar esta canción como quienes aparecían con nosotros en el vídeo. Así que permitidnos que les dediquemos ésta a nuestros hijos. Estén en el escenario esta noche, o no-Niall sonrió, dándole un apretón afectuoso en el brazo a Chad, que sonrió y lo acompañó hasta los bancos.
               -Y también por los que vienen en camino-sonrió Harry, y Niall asintió con la cabeza, los ojos un poco brillantes. Harry se giró y le acarició el mentón a Diana. Layla apoyó la cabeza en el hombro de su padre. Chad le ajustó la correa de la guitarra a Niall, estirándosela. Zayn le guiñó el ojo a Scott cuando éste se sentó a su lado, dándole un toquecito juguetón en el hombro. Tommy se acurrucó contra Louis, que le rodeó los hombros con el brazo.
               -Lo estás haciendo genial-le susurró el padre al hijo antes de que Niall empezara a rasgar su guitarra, retrasando el inicio de la canción con un:
               -Esto es para ti, Chad.
               -Para ti, Didi.
               -Para vosotros, Lay, Rob-dijo Liam.
               -Tommy, El, Dan, Ash-recitó Louis, mirando hacia la grada, justo donde nos encontrábamos.
               -Para vosotras, Saab, Shash, Dundun. Y para ti también, S-sonrió Zayn, dándole un beso a Scott en la mejilla.
               Y Harry empezó a cantar, reflejándose en los ojos vidriosos de Sabrae. Se fueron repartiendo la canción como si Chasing the Stars no estuvieran allí, estos metiendo baza sólo en el momento del estribillo. Sabrae se abrazó a sus hermanas y jadeó sonoramente mientras su padre y su hermano cantaban junto a todos los demás sobre la historia de su vida, sobre cosas que probablemente Zayn había hecho por ella, y seguiría haciendo de no ser por mí: cuidarla de noche, mantenerle el calor, pintarle colores en la habitación.
               Cosas que tendría que volver a hacer cuando yo me fuera y la dejara atrás durante un año que se nos haría larguísimo a ambos, pero… por lo menos me quedaba el consuelo de saber que la dejaba con alguien que no sólo no temía en demostrarle su amor delante del mundo entero, sino que lo necesitaba. En ese sentido, Zayn y yo éramos iguales: los dos necesitábamos que el mundo entero supiera lo muchísimo que queríamos a Sabrae.
               Por las pantallas empezaron a aparecer vídeos de quien estaba cantando con sus hijos: Diana en su primera nevada en Central Park, haciendo muñecos de nieve más altos que ella con la ayuda de Harry; Diana dormitando sobre el vientre de su padre en unas vacaciones, o Diana saltando entre el público mientras su padre se levantaba a recoger un Grammy.
               En la parte de Liam, apareció una Layla casi actual haciendo galletas, su hermano espolvoreándolas con chocolate, y Liam sacándolas del horno. Rob en su primer día de clase, aferrándose muy fuerte a la mano de Layla en un gesto que me resultaba tremendamente familiar. Los dos hermanos posando juntos, con su madre y su padre también, en la alfombra roja de la final de The Talented Generation.
               En la de Zayn, Scott y Sabrae asomándose a la cunita de Duna, con Shasha en brazos del mayor de ellos intentando alcanzarla. Shasha y Sabrae riéndose mientras jugaban al Monopoly; Scott tirado en la arena mientras las chicas lo aprisionaban en ella.
               -The story of my life-empezaron todos-, I take her home. I drive all night to keep her warm.
               Y pusieron un vídeo de Chasing the Stars rumbo a Praga, acompañados en el avión por sus padres. Chad hizo una mueca a la cámara, sacando la lengua mientras Diana se reía, Tommy y Scott al fondo intentando pintarle la cara a Liam sin que éste se enterara, azuzados por Louis y Zayn.
               -And time is frozen-un vídeo de las Malik abriendo regalos en Navidad; luego, de los Tomlinson; después, de Chad en plena batalla de bolas de nieve con sus amigos de Irlanda.
               -The story of, the story of. The story of my life, I give her hope. I spend her love-un vídeo de Layla de pequeña en brazos de Zayn, dormida mientras éste la acunaba, una de las primeras veces que había ido a ver a Sabrae, la Malik más nueva en la fecha que se había filmado el vídeo-, until she’s broke inside-Diana jugando en la playa con una pelirroja que no podía ser otra que Zoe-. The story of my life. The story of, the story of.
               -Written on these walls are the colors that I can’t change-cantó Niall, con un Chad enano de fondo, sobando la guitarra como había visto hacer a su padre tantas veces. Chad hacía un par de años, con la cara pintada con los colores de la bandera de Irlanda y con un caldero cargado de oro entre las manos en el día de San Patricio, su inseparable Kiara a su lado. Chad gateando en dirección a su madre, que lo cogió en brazos y lo levantó en el aire antes de acercarlo a su cara y frotar contra él su nariz.
               Liam tomó el testigo, y pasaron imágenes de Layla graduándose, del primer cumpleaños de Rob.
               -And I’ll be gone, gone tonight-cantó Louis, y por detrás de él pudimos ver a Tommy acompañando a su madre en la primera ecografía de Astrid. A Tommy y Scott jugando juntos en casa. A Eleanor en su último cumpleaños, cogida de la mano de sus hermanos mientras soplaba una tarta. Dan corriendo por la playa en dirección a las olas, en lo que no podía ser otra cosa que el pueblo de Eri.
               Llegaron de nuevo al estribillo, y pasaron imágenes de las vacaciones que se habían tomado Chasing the Stars antes de la segunda mitad del concurso; de Duna jugando en casa con los dos Tomlinson más cercanos en edad a ella, de Chad y Eleanor riéndose en una visita que había hecho él, de Diana y Layla haciendo el tonto en una sesión de fotos, de Rob pululando por casa de los Malik y dejando que Duna lo vistiera de princesa.
               -And I’ve been waiting for this time to come around-entonó Zayn, y de fondo aparecieron dos bebés. Scott y Tommy. Scott tirando de Tommy para ponerlo de pie en sus primeros pasos.
               -But, baby, running after you…
               La imagen cambió a un niño acunando a una Sabrae bebé suavemente en brazos, con tanto cuidado que parecía que la niña estaba hecha de cristal. Por un momento, parecía que el niño era Tommy.
               -…is like chasing the clouds-continuó Zayn, y el niño levantó la cabeza y miró a cámara, sonriente. Noté que Sabrae se giraba para mirarme, y ver cómo procesaba que el niño no tenía los ojos azules.
               Los tenía marrones.
               El niño no era Tommy.
               El niño era yo.
               Por eso la estaba sosteniendo así: porque ya sabía, con tres años y un mes, lo importante que era Sabrae. Lo esencial que era para que yo estuviera bien.
               Me giré y la miré. No me di cuenta de que estaba llorando hasta que Sabrae estiró la mano y me acarició la mejilla suavemente. Estaba absolutamente deshecho por dentro. Me costaba respirar, me costaba enfocarla… pero era agradable. Era como un ataque de ansiedad, pero sin lo malo del ataque de ansiedad: era todo el amor que sentía por ella sobrepasándome.
               -Te quiero tantísimo…-jadeé, inclinándome y abrazándola. Sabrae cerró los ojos y me pasó los brazos por la espalda, acariciándome los músculos, siguiendo las líneas de una piel que se había hecho solo y exclusivamente para que sus dedos la tocaran-. Parece mentira que siga haciéndolo con esta intensidad después de quince años.
               -Por eso lo hacemos con esta intensidad-respondió ella, apartándose de mí para mirarme a los ojos, los mismos ojos marrones que acababan de mirarnos hacía un segundo-: porque hemos tenido quince años para acumularlo. Y ahora lo sabe el mundo entero-sonrió, inclinándose y besándome suavemente.
               No fui capaz de prestar atención a nada más de la canción. La imagen de yo sosteniendo a Sabrae y sonriendo como un niño con zapatos nuevos cuando me llamaba quien nos estuviera grabando iba a acompañarme toda la vida, pero ahora era demasiado reciente para que la apartara de mi cabeza, o por lo menos hasta que no acabara la canción.
               Tam me dio un toquecito en el hombro y me tendió un pañuelo que acababa de pedirle a Karlie, y que yo acepté encantado. Me sonrió con calidez y me dio un apretón suave en el mismo hombro que me había tocado mientras me limpiaba los ojos y, luego, me sonaba.
               -Qué horrible es ser Piscis-solté, sorbiendo por la nariz, y todos se echaron a reír. Liam estaba diciendo algo de cantar otra canción lenta con sus hijos allí, y mientras se preparaban para los primeros acordes de Right now, una chica se asomó a la fila trasera a la nuestra y llamó a Eleanor.
               -Ya es la hora-dijo con discreción, y Eleanor asintió con la cabeza. Sabrae le dio un apretón en la mano cuando pasó tras ella, y Eleanor le sonrió.
               -Aún estás a tiempo de acompañarme.
               -¿Y eclipsar a la estrella de la noche? Ya llegará mi momento.
               -¿Te pidieron que bajaras a cantar?-le pregunté mientras Eleanor desaparecía por el pasillo, levantando murmullos extasiados al comprender el resto del público lo que eso significaba. Sabrae asintió-. ¿Y por qué no accediste?
               Le encantaría estar allí abajo. Disfrutaba como nadie de la atención. Había nacido para agotar un estadio como aquel.
               -Mi hombre está aquí. Y el tiempo que me queda con él es demasiado valioso para perderlo haciéndome la diva. Ya tendré otra oportunidad.
               -¿Tanto tiempo va a ser?-reí, y Sabrae me miró desde abajo, abrazada a mi hombro.
               -Eleanor va a cantar cinco canciones con ellos.
               -Joder. Espero que le paguen la parte proporcional.
               Sabrae se echó a reír sonoramente mientras los del escenario ocupaban sus posiciones frente a unos pies de micrófono que habían colocado en la base del mismo y Tommy se inclinaba al que compartía con Louis.
               -Lights go down and the night is calling to me, yeah.
               -I hear voices singing songs in the street and I know-continuó Louis.
               -That we won’t be going home-entonó Chad-, for so long, for so long, but I know.
               -That I won’t be on my own-siguió Niall-, yeah, I love this feeling and…
               -Right now-entonó Zayn-, I wish you were here with me…
               -Oh-oh-ohh-entonó Scott.
               -Cause right now, everything is new to me.
               -Oh-oh-oh. You know I can’t fight the feeling…
               -Ése es mi chico-sonrió Zayn mientras Scott calcaba los agudos, algo que siempre nos había dicho que era lo más difícil de las canciones. Scott siempre se había sentido un poco intimidado por Right now, porque tenía la dificultad suficiente como para suponer un reto, pero no la bastante como para que su voz pudiera correr libre. Las veces que la había cantado era, decía, como tener un caballo ganador y tener que retenerlo para que no atravesara la línea de meta en primer lugar; como tener un Lamborghini y conducirlo por ciudad.
               -And every night, I feel it. Right now, I wish you were here with me.
               Cuando Scott se retiró del micrófono, miró a su padre y suspiró, sonriendo. Las manos eran una marea de anémonas en el estadio, las linternas de los móviles iluminándolos tanto que apenas hacían falta los focos.
               -Late night spaces with all our friends, you and me, yeah-cantó Liam.
               -Love this… FACES…-entonó Layla, acercándose al micro y cerrando la mano en torno a él mientras Liam asentía, brillando de orgullo-, just like how it used to be.
               -And we won’t be going home-cantaron Diana y Harry juntos-. For so long, for so long, but I know that I won’t be on my on, on my own, I’m feeling like…
               -Right now-cantó Scott-, I wish you were here with me.
               -Oh-oh-ohh-sonrió Zayn.
               -Cause right know, everything is new to me.
               -Oh-oh-oh. Tú solo, S-urgió Zayn, y Scott se adelantó de nuevo para coger el micrófono.
               -You know I can’t fight the feeling-Scott se puso nervioso y se le fue la voz; nada que no sonara bien, todo lo contrario, pero cuando conocías la canción, sabías que no tocaba esa exhibición. Zayn le puso una mano en la espalda, y Scott consiguió recuperarse-. And every night, I feel it. Right now, I wish you were here with me.
               -And I could do this forever-retomó el testigo Zayn, para que Scott descansara y pudiera respirar. Miró a su primogénito, sonriendo, y le guiñó el ojo-. And let’s go crazy together.
               -Lights go down and…-continuó Harry.
               -… I hear you calling to me, yeah-siguió Diana.
                Entonces, todos empezaron a cantar a coro, aunque no era lo que tocaba en la canción. Pero les daba igual.
               Los gritos fueron suficiente prueba de que Scott lo había hecho bien, pero como si necesitara más, Zayn lo estrechó entre sus brazos y le dijo que lo había hecho genial.
               -Estoy súper orgulloso-se escuchó, y sólo entonces pudimos ver que Scott se había echado a temblar de los nervios. Porque, de las canciones de la banda que habíamos conseguido que cantara delante de nosotros, aquella era la que peor le salía precisamente por aquel equilibrio tan difícil de conseguir. Pero lo había conseguido.
               -¡SCOTT, SCOTT, SCOTT, SCOTT, SCOTT, SCOTT!-empezaron a corear Taïssa, Kendra, y Amoke, y pronto nos unimos todos, y luego, la grada entera; y luego, el estadio al completo. Tommy se giró y miró las luces danzarinas coreando el nombre de su mejor amigo, y se rió cuando Scott agitó la mano en el aire para que paráramos, pero no lo hicimos.
               -A ver si seguís vitoreando su nombre cuando su ego gigantesco os aplaste en los asientos-se burló Tommy mientras Layla lo abrazaba y le decía que lo había hecho genial. Mientras que Chad y Diana se unían a ellos, Tommy se acercó y, ni corto ni perezoso, le dio un mordisco en la mejilla.
               -Perdón, es que… me gustaría que me hubiera salido mejor.
               -Pero, ¡si te ha salido genial, S!-dijo Liam.
               -Sí. Casi hasta nos da ganas de echar a tu padre y que ocupes tú su lugar. No podemos esperar a que se vaya. Tú nos caes mejor-rió Louis, y Zayn lo fulminó con la mirada.
               -Eres un gilipollas insoportable que todavía no sé cómo coño se las ha apañado para engañar a una mujer y que tenga cuatro hijos con él. Uno, vale, pero, ¿cuatro?
               -Si te gustan las canciones que escribo para la banda, imagínate las que son tan buenas que me las guardo para la madre de mis hijos-Louis le dedicó a Zayn una sonrisa tan amplia como la del gato de Cheshire.
               -Ponerte a llorar porque te ha salido un agudo no es muy “soy el puto Scott Malik” de tu parte, S-dijo Tommy, y Scott puso los ojos en blanco, intentando sonreír.
               -Es que es jodidamente difícil ser yo.
               -Te acostumbrarás a ser el más guapo, tranquilo-Zayn le dio una palmada en el hombro y Niall prácticamente le escupió en la cara.
               -Es que… joder. Me da pena.
               -Scott, por favor. Esa boca. Esto es un espectáculo familiar-dijo Harry, y se giró con dramatismo hacia el público.
               -OR IS IT?-coreó todo el estadio, y Harry asintió con satisfacción.
               -¿Nos podemos quedar un poquito más?
               -Todavía tenéis que cantar cierta canción que guarda cierto significado para vosotros, ¿no?-replicó Liam, y Scott asintió.
               -Ah. Sí. Claro. Vale. A ver. Eh… ¿Diana, me ayudas?
                -Que Dios me perdone y mi país no me quite la nacionalidad, pero sí, lo haré, inglés-sonrió la americana, guiñando un ojo al estadio-. Hace mucho, mucho tiempo… meses, en realidad, varios de nosotros nos juntamos y cantamos una canción. No estábamos todos-miró a Chad, que se encogió de hombros-, pero creo que ahora es el momento de hacer de nuestra primera canción juntos verdaderamente nuestra primera canción juntos. Así que decidme, Londres, ¿a quién le gusta caminar en el viento?-quiso saber, y el estadio tembló hasta sus cimientos. Diana sonrió, esperó a los acordes introductorios de la guitarra, y se puso a cantar la parte de Harry, ayudada en ocasiones por su padre, pero fundamentalmente, sola.
               Los cinco hijos se acercaron al borde del escenario, y ni cortos ni perezosos, se sentaron mientras Diana cantaba:
               -The fact that we can sit right here and say goodbye means we’ve already one. A necessity for apologies between you and me, baby, there is none.
               Chad se acercó el micro a la boca y continuó cantando, con Niall haciéndole las voces de fondo.
               Scott, Diana, Layla y Tommy entraron a cantar a pleno pulmón con Chad el estribillo mientras sus padres hacían las armonías por lo bajo. Tommy se ocupó de la parte de Louis; levantó la mano como si tuviera un vaso en ella al hablar de hacer un brindis, y luego, le pasó el testigo a Layla. Y volvieron a atacar el estribillo juntos.
               Todos creímos que Diana le cedería el puente a Scott, ya que era el único sin solo para heredar, pero nos equivocamos. Diana no estaba dispuesta a ceder una de sus canciones preferidas simplemente porque había alguien cuyo padre no había sido lo bastante paciente como para esperar a que se grabara la canción.
               -I KNOW WE’LL BE ALRIGHT, CHILD, JUST CLOSE YOUR EYES AND SEE…-Diana levantó la mano, señalando las estrellas que perseguía con su banda mientras los gritos la inundaban-, I’LL BE BY YOUR SIDE any time you’re needing me-miró a ambos lados, a sus compañeros, que le dedicaron una sonrisa, y aplaudieron cuando continuó de nuevo a toda la potencia que daba su voz, las venas de su cuello marcándose como nunca-. OH, YEAH…
               -AND YOU WILL FIND ME-cantaron todos mientras Diana retaba a sus pulmones; One Direction y CTS por igual-, YEAH, YOU WILL FIND ME. IN PLACES THAT WE’VE NEVER BEEN, FOR REASONS WE DON’T UNDERSTAND. WALKING IN THE WIND. WALKING IN THE WIND! WALKING IN THE WIND.
               Se cogieron las manos y se inclinaron para dar las gracias, levantándose a continuación para reunirse con sus padres.
               -Creo que Scott todavía está un poco tocado. ¿Necesitará un poco más de apoyo?-bromeó Niall, girándose para mirar la boca del escenario. En ese momento se encendió un foco más, y todo el mundo se puso a chillar incluso antes de que el rostro sonriente de Eleanor apareciera en las pantallas.
               -¡ELEANORRRRRRRRR!-chillaron sus amigas, como si no acabara de estar con ellas y la hubieran visto marchar.
               -Me preguntaba cuándo me llamaríais. ¿Qué hay que hacer para que te dejen subir a este escenario, perder un concurso de talentos?-preguntó ella, abriendo los brazos, y se anotó un tanto cuando rugimos una carcajada.
               -Tu hija es graciosísima, Louis-escupió Liam.
               -Lo sé. Ha salido a mí. Hola, tesoro-ronroneó el interpelado, dándole un abrazo y un beso.
               -Hola, papi. Amor-sonrió Eleanor, acercándose a Scott y abrazándolo. Murió gente. Se cambiaron vidas. La mía entre ellas.
               Cuando se separaron, Eleanor le guiñó el ojo a Scott y éste le sacó la lengua.
               -Bueno, El, dado que eres la única flamante ganadora que tenemos en este escenario esta noche… creo que lo menos que podemos hacer es dejarte elegir la siguiente canción. ¿Quieres una balada, o más bien un hit?
               -Quiero la balada más hit que tenéis. Dejémonos de tonterías, chicas-sonrió Eleanor, acercándose al borde del escenario-; todas hemos venido hoy aquí porque queremos escuchar una canción en particular, ¿verdad?
               -¡SÍ!-gritamos todos, yo con el resto del estadio, aunque, la verdad, no tenía ni puta idea de a qué canción se refería Eleanor. ¿No habíamos venido por Where do broken hearts go?
               -¡Pues vamos al lío! ¡Damas y caballeros, una de las mejores canciones que ha escrito mi padre… STRONG!
               -Woohooo-entonó Tommy mientras por los altavoces comenzaba a sonar la música. Los diez… once… nueve se pusieron en fila, prestos a hacer con gestos la letra de la canción.
               Scott, sin embargo, tenía sus propios planes. Siguió a Eleanor hasta el centro de la pasarela, la agarró de la cintura, la obligó a girarse para mirarlo, y empezó:
               -My hands, your hands, tied up like two ships. Drifting, weightless, waves try to break it, I’d do anything to save it-Scott le apartó el pelo de la cara a Eleanor y se lo colocó tras la oreja-. Why is it so hard to save it?
               -Nadie va a quererme como Scott quiere a Eleanor-lloriqueó Duna. Dan se la quedó mirando, abrió la boca para contestar, pero, viendo que a sus diez años todavía no había reunido el valor para decirle lo equivocada que estaba, la cerró de nuevo. Miró en derredor, y cuando me pilló mirándole, se puso rojo como un tomate y volvió a mirar hacia delante.
               Pobre chiquillo.
               -So many words we’re not saying, don’t wanna wait til it’s gone, you make me strong-Liam señaló al público, que se puso a gritar. Harry rompió la formación en el estribillo, y Louis se acercó al público en su parte, con todos, Eleanor liderándolos, dedicando todo lo que tenían al estribillo. El puente lo hizo Zayn, excepto la última frase, que se la apropió Scott, y volvió a cantársela a Eleanor, que jadeó sonoramente al ver a su novio, la mejor voz masculina de su generación, decirle que era ella la que lo hacía fuerte delante de noventa mil putas personas.
               Hay que reconocerle algo al hijo de puta de Scott. El muy cabrón sabe aprovechar muy bien su ventaja, y tiene es…
               RETIRO LO DICHO. Apenas acabó su parte, levantó la vista y miró hacia el palco, directamente hacia mí, como diciendo “supera eso, Whitelaw”.
               -Serás hijo de puta-gruñí por lo bajo, y Scott se relamió los labios, sonriendo. Te juro por Dios que acababa de leerme los labios, el muy sociópata.
               -Ew. Buscad una habitación-protestó Tommy cuando Scott y Eleanor se fundieron en un profundo abrazo. Niall rasgueó su guitarra de nuevo con unos acordes familiares, y antes de que pudiéramos darnos cuenta, estaban todos de nuevo sentados y entregados a Little things. Las luces de los móviles volvieron a bailar, y explotaron cuando Liam canturreó mientras morían los acordes:
               -Me está dando la bajona…
               Niall se incorporó y empezó a tocar su guitarra con más garbo, inclinándose ligeramente hacia delante en unas notas mucho más animadas. El público empezó a gritar, y entonces, Harry se giró hacia el estadio al completo, todavía de pie.
               -b-b-b-baby, come on over, I don’t care if people find out.
               -DADA DADADA DA DA DA DA-contestaron todos, poniéndose de pie y paseando por el escenario. Harry se incorporó de un brinco y continuó con su parte, y antes de que pudiéramos darnos cuenta, estábamos dando palmas, brincando y saltando dirigidos por ellos, y gritando a pleno pulmón la letra de Magic. Cualquiera diría que hacía dos segundos casi nos habíamos puesto a llorar con Little things.
               De ahí no nos dieron tregua, y pasaron a Temporary fix. Chad y Niall cantaron sacudiendo el culo con su parte, Liam lanzó el micro al aire mientras Layla se ocupaba de la suya, y cuando todos empezaron a cantar el estribillo, se pusieron a corretear por el escenario, animándonos a saltar más, más, más.
               -The night is on your lips and I feel like I’m locked in, there’s a million llights, I don’t care if they’re watching-coqueteó Diana con Tommy, y cuando parecía que iba a besarlo, giró sobre sí misma y le dio con el pelo en la cara. Continuó con su parte cantando frente a Layla, y Harry retomó el verso a la mitad, apartándose el pelo de la cara y agitando las caderas. Todos juntos saltaron de nuevo en el estribillo, y entonces, Louis se subió de un salto a uno de los bancos.
               -We can roll in the darkness-estiró la mano, y Tommy continuó desde el banco al que se había subido
               -Let me touch you were your heart is.
               -And if you’re feeling the weakness…-cantaron los dos.
               -WELL I TOLD YOU BABY THAT YOU CAN CALL ME-gritaron los dos Styles, y Harry continuo subiendo la nota mientras Diana seguía-. I’LL BE YOUR TEMPORARY FIX, YOU CAN CALL ME.
               Hicieron el estribillo y se pusieron a dar palmas mientras la guitarra cambiaba.
               -VOLVEOS LOCOS, LONDRES. ESTA CANCIÓN ES DE LOS TOMLINSON-ordenó Eleanor.
               Y vaya que si lo fue. Puede que Niall iniciara No control, pero nadie lo hizo como los Tomlinson. Cantaron el estribillo los tres juntos, a pleno pulmón, sin importar si sonaban bien o mal (sonaban genial precisamente por eso), y mientras Zayn hacía el puente de la canción, Eleanor, Tommy y Louis se pusieron en triángulo y empezaron a bailar como había bailado Louis al principio de la banda: con movimientos ridículos que sólo podían hacer guays estando en One Direction. Dos golpes del codo izquierdo hacia abajo, luego el derecho, luego el codo izquierdo hacia un lado, luego el derecho, y así repetir, y repetir, y repetir. Eleanor se echó a reír.
               -WAKING UP-levantaron las manos-, BESIDE YOU-se llevaron dos dedos a la frente- I’M A LOADED GUN-fingieron encañonarse con una pistola-, I CAN’T CONTAIN THIS ANYMORE, I’M ALL YOURS-sus rodillas cedieron y se llevaron una mano al pecho-, I GOT NO CONTROL, NO CONTROL.
               Louis, el más payaso de los tres, se tiró al suelo, las rodillas ancladas en él; sus hijos no tardaron en seguirlo.
               -POWERLESS, AND I DON’T CARE IT’S OBVIOUS, I JUST CAN’T GET ENOUGH OF YOU- clamaron, estirando las manos hacia delante, intentando alcanzar algo que no eran capaces-. THE PEDAL’S DOWN, MY EYES ARE CLOSED-se taparon los ojos-. NO CONTROL.
               Se levantaron de un salto con el sonido de la guitarra mientras los focos parpadeaban salvajemente, y todos se unieron a las notas altas.
               La locura del estadio fue absolutamente ensordecedora, y los tres Tomlinson sonrieron, cogiéndose de los hombros y haciendo una reverencia en dirección a su público. Tommy y Eleanor se separaron de su padre y se pusieron a aplaudirlo, y Louis agitó las manos en el aire, subiéndolas y bajándolas para hacerles una reverencia a sus hijos.
               -Bueno, es hora de que esta gente se pire antes de que nos roben a las fans-comentó Niall, y Liam asintió con la cabeza.
               -Sí, tampoco hacía falta que nos humillarais así.
               Diana y Scott se rieron mientras Layla le sacaba la lengua a su padre.
               -Nos dejaréis despedirnos, al menos, ¿no?-preguntó.
               -¿La última, Londres?
               -¡No!
               -La última nuestra-aclaró Chad, y se rió cuando un gemido de alivio recorrió el estadio. Se giró y miró a su padre-. Creo que vas a necesitar ayuda para esta…
               Se fue a los pies del escenario y recogió una guitarra. Varias chicas se desmayaron cuando las saludó.
               Me sorprendía que quedara gente en pie, la verdad. Chad sonrió, mirando a cámara.
               -Preparaos, Londres, porque nos vamos por todo lo alto.
               Y bajó el brazo y arrancó un rugido de la guitarra idéntico al de su padre.
               Incluso si la canción no tuviera un principio tan rápido de la letra, en la que literalmente se decía el título, ya con esos dos acordes era imposible confundirla con ninguna otra.
               Pero, por si acaso, Diana se llevó rápidamente el micro a la boca y empezó, mirando directamente hacia la cámara, y por ende a todos aquellos que había en el estadio:
               -One way, or another, I’m gonna find ya…
               Y todos nos pusimos a saltar; yo el que más. Me parecía imposible sobrevivir a aquella noche, así que, ya que me iba a quitar la quebradura de cabeza que sería decidir si realmente me piraba de voluntariado o no, qué menos que morir pasándomelo de putísima madre.
                

 

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