2012.

Decían que era un año de fin, que todo se terminaría. Pero era mentira. Decían que los mayas aseguraban que todo iba a acabarse, pero también era mentira. Los mayas no decían que todo fuera a acabarse.
Decían que todo iba a cambiar, y todo cambió para mí este año. Absolutamente todo.
Nuevos amigos, nueva forma de pensar, nueva forma de ver las cosas. Siempre jodida, eso sí, eso es lo único que no cambia, pero una se termina acostumbrando. La vida te hace de una manera para que soportes lo que necesites, y yo voy a necesitar mucha paciencia y fuerza para enfrentarme a lo que más deseo.
Para empezar, crecí como artista, por así decirlo. Cambié mi forma de actuar; de mujer perdida a choni cabreada, sin olvidar a mi queridísima mexicana cabreada, mi chamaquita, mi personaje favorito de los que he hecho hasta ahora. Ponerse delante de un público a hablar con un acento y algunas palabras que no son las tuyas es de lo más especial y valiente que he hecho en mi vida.
Sigamos con Italia. Un país maravilloso que desde pequeña quería conocer. Ni Alemania, ni Francia, no, yo Italia, que para algo es la cuna de la humanidad tal y como la conocemos. Bueno, la guardería. La cuna es Grecia. No olvidaré esos paisajes tan bonitos, esas ciudades en las que puedes palpar la historia, los paseos que dimos por este país hermano nuestro. ¿El mejor día? El último, en Roma, cuando fuimos diez chavales a nuestra bola, entramos en el Coliseo, nos tumbamos en los foros, y fuimos de compras por las tiendas de extranjeros.
Aunque Capri siempre tendrá un lugar especial en mi corazón. Me he enamorado de esa isla, y pienso volver algún día. Aunque solo sea para bañarme en sus preciosas playas, algún día volveré.
Luego estuvieron las geniales películas de este año. 2012, Los miserables... y Amanecer. El final de mi saga perfecta, esa saga que llevaba acompañándome desde 2008. No estaba preparada para esto, pero he tenido que asumirlo. Y, sin embargo, mi corazón todavía está esperando el estreno de una película que no va a salir nunca. Cumplí mi palabra, el juramento que hice cuando me puse a ver Crepúsculo por Internet y descubrí que iba a ser algo grande: pienso ir a todos los estrenos, a todos. Las veces que he ido al cine a ver esta saga que vivirá para siempre, han sido siempre en sus estrenos, con personas muy diversas, pero siempre el mismo sentimiento: orgullo por el trabajo realizado por el director y agradecimiento a Stephenie por dos cosas; por crear esto, y por devolverme a Taylor, desaparecido desde que yo tenía 7 años. Gracias, Stephenie. No lo olvidaré.
Y llegó One Direction. En realidad, había llegado antes, pero fue en 2012 cuando terminé de enamorarme de ellos, cuando asenté las bases de lo que soy ahora. Directioner. Con todo lo que ello implica. Sin ellos, no sería nada. Estaría machacada en una esquina, pensando que no valgo nada, pensando que soy estúpida por intentar hacer reír a los demás, cuando ellos me han enseñado que es de lo más valiente que puedo hacer.
También ha sido el año en que empecé este blog, el año en que comencé a escribir, y descubrí lo muchísimo que me gustaba. El año de mis dos historias (la que ahora mismo está abandonada y la que no está tan abandonada, la que me está enamorando cada vez más y más de mis ídolos), el año en que entendí por fin lo gratificante que es poner algo por escrito y que otra persona lo lea y te diga que le gusta. Como nos dijo Gonzalo Moure una vez "cada libro es un fracaso", pero, Dios, qué fracaso más bonito.

También ha sido el año en que he descubierto libros y autores fantásticos, como Criadas y señoras, Pequeñas mentirosas, los libros de Stephen King, de Ken Follet... tal vez tenga la lectura un poco abandonada por culpa de mi nueva obsesión por escribir, pero siempre habrá una ávida lectora esperando para devorar un buen libro en mi interior.

Tumblr, ese sitio que me encanta, del que apenas puedo salir. El sitio que me acerca más y más a mis ídolos, que me hace conocerlos un poco mejor cada día y que me maravilla con las preciosas fotos que aloja.
Twitter. Esa red social que me ha cambiado la vida, me ha demostrado que se puede querer a una persona a la que nunca has visto, que hay gente como yo dispuesta a quererme y valorarme ahí fuera. Mil seguidores, y subiendo.Un sueño hecho realidad.  Tal vez haya cambiado de nombre (de @team_tayCobLL a @EriLautTommo), pero una cosa es segura. Mi amor por esta red social, mi red social favorita, nunca, jamás, morirá.
2012 ha sido el año en que he empezado a luchar por mis sueños. A partir de ahora mi vida será diferente, tendré que ser la mejor, mi sueño lo necesita. He pedido deseos al morir este año. He pedido muchas cosas.
Mis sueños son grandes, no estoy para desaprovechar oportunidades. Necesito cada ayuda que pueda tener. Necesito a todas las personas posibles a mi lado.
Solo te pido una cosa, 2013. Haz lo que tengas que hacer. Dame la caña que necesites, necesito acumular putadas del Karma para cobrarme favores algún día. Pero, por favor, que las putadas sean por algo.

Por favor, que esto sea una deuda engordando, y no la tortura antes de mi muerte.