¡Hola, startie! Hoy te traigo mi opinión/reseña sobre una
película que vi hace un par de semanas, pero que, si te soy sincera, me
encantó. Se trata de:
He de confesar que me acerqué a esa película por pura
curiosidad; quería ver cómo se desenvolvía Kristen en ella, y comprobar si
merecía el César que recibió (es la primera actriz americana que consigue este
premio del cine francés, considerado el equivalente al Oscar en Francia o al
Goya en España). Y, si te digo la verdad, creo que se defiende estupendamente,
tiene una actuación muy buena, pero no estoy segura de si realmente merecía
este premio. Aunque, claro, habría que ver las películas de las otras
candidatas, y el francés no es mi fuerte, ni su cine, algo que yo pueda
aguantar mucho rato.
El caso es que sólo quería ver la película para comprobar
si Kristen merecía lo que le dieron, pero terminé enamorándome de la trama y
del resto de personajes, en especial del interpretado por Juliette Binoche: una
actriz, en su día una de las mejores y más famosas, que se enfrenta al reto de
interpretar a la antagonista del personaje con el que saltó a la fama, una
joven hermosa que consigue despertar deseos irrefrenables en una mujer que le
dobla la edad. El personaje joven será interpretado con una Chloë Grace Moretz
a la que sólo me apetece morderle ambos mofletes, tanto por lo tierna que es
como por lo bien que actúa.
En esta historia nos encontramos con uno de los dilemas
más importantes de la vida, especialmente en la vida de una actriz: el aceptar
el paso del tiempo y abrazar la vejez, disfrutar “de la experiencia que trae el
ser una actriz experimentada pero dejar de aferrarse a los privilegios de la
juventud”, frase que formula (más o menos) el personaje de Kristen, la
asistente de Juliette. Podemos ver cómo Juliette al principio se muestra
reticente a llevar a cabo la creación del personaje que una vez fue su
antagonista, por conocer demasiado bien al suyo propio y saber que se verá
arrastrada por sus motivos y que querrá defenderla, dado que una vez, personaje
y actriz fueron uno. Pero, poco a poco, Juliette va aceptando el paso del
tiempo y le deja paso a Chloë, estrella juvenil por sus blockbusters (en eso el
guiño a Kristen es acojonante) y celebridad malograda (llega a recordarme a
Lindsay Lohan), que quiere reciclarse en el teatro y demostrar que no sólo es
una cara bonita, construyendo un personaje con luces y sombras como nunca antes
había llevado a cabo.
Además, en la película también presenciamos la complicada
relación de un asistente personal con el actor al que representa: es como si
Kristen y Juliette se intercambiaran los papeles, no porque la segunda no tenga
fama ni talento (eso es indiscutible), sino porque la primera es la más famosa
de las dos, por lo menos ahora, y por las decisiones que ayuda a la otra a
tomar: seguir creciendo como actriz y aceptar el paso del tiempo, buscar nuevos
proyectos y no anclarse en el pasado (algo que sería muy fácil para Kristen,
gracias a los sueldos que se embolsó con Crepúsculo).
Aquí, Kris demuestra que es mucho más que una niña en apuros que necesita
de criaturas mitológicas que la salven, y, de hecho, se convierte en la
salvadora de la persona a la que está protegiendo. Es una especie de Edward
Cullen positiva en el cuerpo de Bella Swan. Todo muy cómico, la verdad.
Y, antes de pasar con el esquema de siempre, quisiera
apuntar algo: se trata de cine independiente. Y yo soy muy, muy, muy
fan de los blockbusters, pero esta
película me ha encantado. No es para nada lo que me esperaba, sino algo mucho
mejor. Me ha ayudado a descubrir una nueva faceta del cine, mucho más profunda
y reflexiva, que puede que incluso llegue a preferir un día sobre tiros y explosiones.
Porque me he visto a mí misma reflejada en la película por el personaje de
Chloë: una joven que quiere un futuro mejor para sí misma, y que quiere
demostrar lo que vale realmente. El film es una pequeña obra de arte en un
mundo de imitaciones, un soplo de aire fresco nada más salir a la superficie
después de mucho tiempo inhalando el oxígeno metálico de una bombona. Una muestra
de que con buen material humano, se puede conseguir algo que guste tanto como
una obra producida casi enteramente por ordenador.
Lo mejor: las relaciones
de los personajes, cómo presencias su evolución, y las constantes reflexiones
sobre la vida, el arte, y la actuación.
Lo peor: creo
que no se ha estrenado en España, por lo que tendrás que buscarte una
versión original (en inglés, gracias a Dios). No obstante, la película no hará
que te pierdas: su vocabulario es sencillo, excepto en las reflexiones, y es
fácil seguir las conversaciones.
Puedes verla a través de PopCorn Time, un programa que me
recomendaron para ver series y películas por Internet, del que puede que hable
en profundidad más adelante. La calidad del vídeo es óptima; lo único malo es
que no hay opción a ver nada en español, está todo en versión original.
La molécula
efervescente: uno de los momentos del final, cuando están ensayando la
obra, en el que se ve la primera escena. Después de dar varias vueltas por el
escenario, Chloë camina hacia el frente de éste, se le hace un primer plano que
me puso los pelos de punta, y, automáticamente, se funde al negro.
Grado cósmico: Estrella
{4/5}.
¿Y tú? ¿La has visto? Si es así, ¿qué fue lo que más te gustó?
¿Compartes mi opinión, o a ti te pareció un bodrio pésimo?
Pues ya sabes, aquí abajo tienes una cajita en la que
podemos intercambiarnos los papeles. Si tú quieres, claro.
Lo que más me gustó sin duda fue Kristen. Cuando la vi no me paré demasiado a apreciar la película en si: básicamente, porque no es una película que puedas asimilar solo viéndola, tienes que pararte a darle vueltas después. Y no lo hice, o más bien no pude hacerlo, el flequillo que Kristen se ponía a veces me desconcentraba. Chica, quítatelo. Lo que sí pude apreciar fueron las actuaciones de las actrices, las protagonistas se salieron, y Chloe también. Estoy segura de que es una película bastante buena, pero no consigo que me interese su transfondo. Culpa del flequillo de Kristen, seguro.
ResponderEliminarGracias por tu comentario, corazón ♥ Ay, pobre flequillo de Kristen; a mí sinceramente me hace gracia, es muy mítico ese gesto suyo de echárselo para atrás. Es como su firma personal, no sé. Pero sí que es verdad que si no te gusta, te terminas centrando mucho en él precisamente por eso.
EliminarEn lo relativo a las actuaciones, totalmente de acuerdo; me encantaron, y Chloë me sorprendió muy gratamente.
Un beso ♥