miércoles, 29 de agosto de 2012
I'm still here, bitches. And I know everything-A.
Después de una larga pausa, Mona se rascó un lado de la nariz, tenía las
 uñas pintadas con la laca negra edición limitada La Vernis de Chanel. 
Hanna se acordó de los dos frascos que robaron en Sephora. El recuerdo 
hizo que se le saltaran las lágrimas. Sin Mona se sentía cromo un 
vestido sin accesorios a juego; como un destornillador sin nada de 
vodka, todo zumo de naranja; como un iPod sin auriculares. Se sentía 
fatal, incompleta. Hanna recordó aquel verano de octavo curso cuando 
acompañó a su madre en un viaje de trabajo y su móvil se quedó sin 
cobertura, cuando volvió tenía veinte mensajes de voz de Mona.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Dedica un minutito de tu tiempo a dejarme un comentario; son realmente importantes para mí y me ayudarán a mejorar, al margen de la ilusión que me hace saber que hay personas de verdad que entran en mi blog. ¡Muchas gracias!❤